¿Qué tiene que ver una dieta sana con una mente sana?
Es difícil para muchas personas entender la conexión entre lo que comemos y como nuestro cerebro funciona es afectado por lo que comemos a diario. ¿Cómo es esto posible? Imagínese que nuestro cuerpo es como un vehículo que necesita gasolina y aceites para que funcione bien. Para este ejemplo vamos a usar un Mercedes Benz (MB), ahora bien, supongamos que cuando compramos el nuevo MBs funciona bien y todo sentimos la velocidad nada más con tocar el acelerador con la punta de nuestros dedos. El tiempo pasa y le ponemos la gasolina que sea aun si el manual dice que necesitamos usar gasolina Premium y sin Plomo. Por algunos meses el carro funciona como siempre, pero ya después de algún tiempo sentimos que el coche empieza a perder su aceleramiento instantáneo como hace unos meses atrás y ahora nos encontramos casi poniendo todo nuestro pie en el acelerador para qué valla al máximo pero su rendimiento es inferior al de antes. Preocupados por lo que les pasa a nuestro MBs que nos costó tan caro lo llevamos al mecánico y nada más nos reprende por no seguir las indicaciones de el manual. Cuando mecánico nos diga en cuanto va a salir la reparación casi nos dará un ataque al corazón y casi nos morimos cuando nos indique que jamás va a volver estar como nuevo porque no solo hemos estado poniéndole al carro gasolina inferior pero también aceites y lubricantes que son inferiores y han dañado toda la maquina y tendrá que ser remplazada. Pero, por lo menos el MBs puede ser más o menos reconstruido casi por completo pero nuestro cuerpo no.
Llevar una dieta sana para tener una mente sana suena ilógico pero es algo que muchas dietas ignoran y nada quieren engañar a la gente diciéndoles que lo que importa solo es quitarse esos kilitos de mas y hacer desaparecer todos los problemas exteriores relacionados con el sobre peso o la gordura. Asi como el ejemplo de el Mercedes Bens, no importa como luce por afuera si por adentro esta hecho un desastre y no acelera como un carro de su categoría debería. Cuando lo quisieras vender no podrías porque los nuevos compradores probablemente esperan un coche que acelere sin esfuerzo y que se maneje de una manera placentera ya que van a gastar tanto dinero en esto. Así son nuestros cuerpos y nuestros cebreros, no importa como luzcamos por afuera si nuestro interior se está muriendo poco a poco. En futuros artículos escribiré mas sobre nuestros cuerpos en general, pero por ahora nos vamos a concentrar en uno de nuestros más importantes el cerebro y como nuestra mente es afectada por comida que no es sana para nosotros.
---Parte 2 continua aqui---
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